Seguir a Jesús - ¿Qué significa?
Seguir a Jesús suena muy simple, pero para algunos es un concepto confuso. El seguir a Jesús consiste en:
Seguir a Jesús - ¿Qué significa aceptarlo?
¿Cómo es posible seguir a Jesús? ¿Qué significa aceptar a Su Hijo y cómo lo hacemos? La única manera es a través de nuestra entrega total (sin importar nuestra nacionalidad, sexo, o linaje) al que se entregó a Sí mismo por nosotros. "Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a Su Hijo unigénito, para que todo aquel que en Él cree, no se pierda, más tenga vida eterna. Porque no envió Dios a Su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por Él" (Juan 3:16-17).
¿Alguna vez ha amado tanto a alguien que estuvo dispuesto a hacer lo que fuera por esa persona? Muchos de nosotros hemos dicho que sí. Jesús no solamente lo dijo, sino que lo demostró. Él hizo el sacrificio supremo. Jesús dio su vida por nosotros. A cambio, sólo pide que le sigamos. En Juan 8:12, la Escritura dice: “Otra vez Jesús les habló, diciendo: ‘Yo soy la luz del mundo, el que me sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida.'"
¿Ha sido su vida un desastre? ¿Ha sentido que camina constantemente en tinieblas, sin esperanza? ¿Está dispuesto a entregarle sus caminos destructivos a Él y a seguirlo? Si respondió afirmativamente a estas preguntas, tiene la oportunidad de entregarle todo a Él. Él puede conducirlo a una vida mejor, bendecida, y llena de esperanza.
Seguir a Jesús - ¿Puedo ser un discípulo?
Una vez que ha tomado la decisión de seguir a Jesús, usted puede convertirse en uno de Sus discípulos. En realidad, la palabra discípulo significa aprender o seguir. Tal vez piense que no es lo suficientemente bueno o digno para convertirse en un discípulo de Jesús. Pero la Biblia nos dice que Él nos ama a todos por igual, como lo dice Pedro en Hechos 10:34-36, "En verdad comprendo que Dios no hace acepción de personas, sino que en toda nación se agrada del que le teme y hace justicia. Dios envió mensaje a los hijos de Israel anunciando el evangelio de la paz por medio de Jesucristo, éste es Señor de todos."
Seguir a Jesús no significa que no tendremos tribulaciones. De hecho, muchísimos seguidores de Jesús han sufrido tremendas persecuciones. Pablo habla de esto en 2da de Corintios 12:1-9. Dijo: "Tres veces he rogado al Señor que lo quite de mí. Y me ha dicho ‘Bástate mi gracia. porque mi poder se perfecciona en la debilidad.' Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo. Por lo cual, por amor a Cristo, me gozo en las debilidades, en afrentas, en necesidades, en persecuciones, en angustias, porque cuando soy débil, entonces soy fuerte."
Dios puede demostrar Su poder, misericordia, y gracia soberana a través de nuestros peores momentos. Y dice que las tribulaciones nos hacen más fuertes. Pero como seguidores Suyos, ahora tenemos a Jesús para ayudarnos, guiarnos, y reconfortarnos a través de las tribulaciones -- grandes y pequeñas. Seguir a Jesús nos da consuelo y recompensa más allá de nuestra comprensión.
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